Resistir
Por Lola Suárez Cichero
(Primer cuatrimestre de 2021)
“Éramos robinsones que, en lugar de quedar atrapados en una isla, estábamos
aislados en nuestra propia casa. No nos rodeaba el océano, pero sí la muerte”, El
eternauta.
Héctor Germán Oesterheld nació en Buenos Aires, Argentina, el 23 de julio de 1919.
Estudió la carrera de geología en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la
Universidad de Buenos Aires. En 1943 publicó su primera obra, Truila y Miltar, en el
suplemento literario del periódico La Prensa. En 1957 fundó, junto con su hermano
Jorge, la Editorial Frontera. El 4 de septiembre de 1957 apareció el personaje más
exitoso de la editorial: El eternauta, con dibujos de Solano López.
Como dice Pablo Capanna en su ensayo “Catástrofe”, en los textos de ciencia ficción
se ven reflejadas anticipaciones sobre el futuro y también sobre diversas catástrofes. El
cómic de Oesterheld es un claro ejemplo de eso, el fragmento de El eternauta
mencionado anteriormente fue escrito hace 64 años y perfectamente podría estar
describiendo la pandemia que atravesamos hoy en día. Los tapabocas son tan vitales
para nosotros como un traje de buzo reformado por Favalli.
“Creo, aunque peque de inmodesto, que fue lo mejor que se hizo en ciencia ficción en
la Argentina y porque es una historia que no envejeció; al contrario, es vigente.” Héctor
Germán Oesterheld, sobre El eternauta.
¿Por qué un cómic podría ser tan significativo después de tantos años? ¿Será porque
El eternauta no es solamente un ataque extraterrestre? ¿Será por los mensajes que
nos quiere transmitir? Claramente nos referimos a una historia dedicada a un público
adulto, que logra que el lector se sienta identificado.
Además, podríamos decir que lo que hace la diferencia en este cómic es que su héroe
es una persona normal, alguien que no posee de ningún tipo de poder o habilidad
especial. Uno de los mensajes que tiene El eternauta es que cualquiera de nosotros
puede ser el héroe o la heroína de nuestra historia, sólo tenemos que resistir.