Los libros como fuerza transformadora
Por Rodrigo Pavez
2do cuatrimestre 2018
A lo largo de la Historia el ser humano ha ejercido dominación sobre otros de distinta manera. Es interesante estudiar e intentar entender cómo este mecanismo fue variando en sus facetas y adaptándose al entorno.
La lectura, comoactividadconstructora del Sujeto, y la reflexión,
comohábito de cultivoespiritual, hansidotemas de preocupación para las
clasesdominantes. Estasprácticasfueron, desdesuscomienzos, exclusivas de la
clasepudiente, de loshacendados, de la elite. Con el acontecer de movimientos
que cambiaron a las sociedades, y la lucha que hanprotagonizado las
clasesbajas, las expresionesartísticas y socialesfueronaflorando de acuerdo a
la adversidad de turno; se fueganando un terrenointelectual que comenzó con una
palabra y culminó en el alma.
Si hacemosunrecorridodesde la aparición de la imprenta de la mano de
Gutenberg hasta lostiemposactualespodemos registrar bastantesepisodios de
opresiónideológica y de censura. Desde la Inquisición y el incendio de
Alejandría hasta la persecución de losgobiernos de facto y la
seleccióndelirante de lostemas a trataren la educación, que
actualmentetraepreocupados a variosespecialistasidóneos,
podemosreafirmarnuestrocamino de coprotagonistasenestecircuito de resistencia.
El discurso de dominación se actualiza de la mano de las publicidades y
delconsumo. Se traduce enla mirada superficial que define a una persona para
que acceda o no a ciertocírculo social.
Estosdiscursospropiamentedichosfueroncambiando.Desdeunapersecuciónactiva
y violentahacialos “enemigos” del bienestar general hasta la dominación
“pasiva”, pero de igualviolencia que padecemos hoy. Aunquecabedestacar que la
piedra angular de la resistencia ha sido y serásiempre la misma: el cuestionar.
Esfácildetectar las intenciones de aquellos que nosinvitan a participar
de ciertocírculo y de gozar de susbeneficios al usar o comprartal o cualcosa;
esrápidopercibirlo, pero el cuestionarloesunaelaboraciónmásprofunda y
quizásmásdesafortunada para aquellos que no deseannegociarsu zona de confort.
Hoy el productomás rentable es el serhumanoconsumista. Cultivarloenciudades y
de acuerdo a recetaseconómicas, que impliquen vender sutiempo de vida a favor
del Capital, es el objetivoclaro de losgrandesgruposeconómicos que se
escondenbajo escudos conservadores. ¿Cómoresistimos y
detectamosestosadoctrinamientos?Ilustrándonos, en palabras de Mariano Moreno:
“Si los pueblos no se ilustran, si no se vulgarizansus derechos, sicada hombre
no conoce lo que vale, lo que puede y lo que se le debe,
nuevasilusionessucederán a las antiguas, y después de vacilaralgúntiempo entre
mil incertidumbres, serátalveznuestrasuertemudar de tiranos sin destruir la
tiranía”.
¿Quéesunlibrosi no un sueñomaterializado?
Atinamos a rescatar el valor de las ideas pormásmaterializadas que sean,
y rescatamos con regocijolosinsomnios de la familiaAlzogarayVanellaen “la
luchapor la construcción de la memoria”, donde la
incertidumbreinicióestatravesía de exhumarloslibros que fueron “testigos
de unageneración” y que inspiraron el proyecto de La BibliotecaRoja.
Ese material bajotierra, talcomo la memoria y loshuesos, hablancomo
antes, pero de otramanera, “la memoria con el tiempo se vamoviendo”
reflexiona Tomas AlsogarayVanella, hijo del matrimonioexiliado que
enterrósubibliotecaen la época del últimoprocesomilitar. Estoslibros
“peligrosos” resistieron al azote deltiempo y son testigos de
losespíritusmutilados que amputaronlos que tenían el poder.
Regresanresignificados de susentido original, con unacarátulafosilizada,
meteorizada y húmeda que no
transmiteaquelconocimientoporloscualesfueroncreados, sinounomásevidente: el de
habersidoviolentados, “esosvolúmenes que, como las personas sobre la
superficie, habíanseguidoviviendo y cambiando”.
Entiemposactuales, losgruposconservadoresnuevamenteatentan contra algunoscontenidosimportantes para la formación de losjóvenes; por lo tantoactivamos el sentido de la “memoriaenmovimiento” y defendemos el Derecho de la libreExpresión y de ProducciónIntelectual.Exigimostoda la informaciónútil que necesitamoscomosociedad para mejorarnuestracalidad de vida, y poderdiscernir de acuerdo al Conocimiento y no al SentidoComún. Creemosfirmemente, que en la ilustración se encuentra la Resistencia y que con la formaciónintelectual se promueve la atribución de nuevossignificados y símbolos al mundocircundante. La persecuciónideológica y la dominaciónpuedendejarmuerte y librosincendiados y enterrados, pero no pueden “tapar el sol con undedo”, no puedenimpedir que un sujetosigaatribuyendosignificados y cuestionando la realidadcircundanteninegar el “fuertevínculo entre ideología, política y libros”.
*La foto que ilustra este escrito es del
fotógrafo Ricardo Figueira y es parte de la muestra “Memoria en llamas”