Retrato distorsionado de una musa
Por Alma Guadalupe Ábalos
Segundo cuatrimestre 2016
Milagros se ve en el espejo y acaricia su cabello reseco de tantos cambios de tinte en el mismo, su rostro hace una mueca de desaprobación al enterrar sus dedos en él. Decide volver la vista a su armario buscando sumamente desesperada algo de ropa holgada. A sus 20 años, le agrada vestir con prendas no tan a la moda, lo retro le encanta, varias veces se cuestiona frente a su reflejo dice estar molesta por sus caderas y su vientre no tan llano como el de las modelos que salen en las revistas de moda que consume.
Con tan solo 20 años Milagros es un ejemplo a seguir. Su lucha contra una de las tantas enfermedades que afectan a la sociedad, la anorexia y la bulimia, son lo que me lleva a fotografiarla. A sus 17 años por dificultades geográficas sus padres debieron cambiarla de colegio: tendría que empezar de nuevo y hacer amigos. Fue un calvario para ella. Una institución de clase media-alta donde no lograba encajar por el solo hecho de ser simplemente de clase media. Dentro de aquel grupo de complejos comenzó a sufrir discriminación de sus mismos compañeros por su cuerpo. No ser lo suficientemente esbelta como algunas de las jóvenes que estudiaban allí le generó el disgusto y la desesperación de ser delgada a cualquier precio.
Lo que comenzó como una salida rápida de lograr su “peso ideal” se volvió una vorágine que se fue de sus manos. Empezó a comer como lo hacía día a día, solo que se purgaba o ingería algún laxante, así fue como dio comienzo a la bulimia. Su cuerpo dio un drástico cambio en solo 3 meses: de sus 66 kilos pasó a pesar tan solo 60. Junto con la falta de alimento también insertó el cigarrillo en su vida.
El cambio no solo se notaba en sus ya vagas curvas sino también en su cabello seco, sus ojos cansados, su piel tan sensible y reseca. Con sus 18 años cumplidos sin pensarlo y con una mirada bastante distorsionada sobre su cuerpo decidió dar un paso más. Así fue cómo la anorexia comenzó a consumirla de una manera rápida. Su ropa era cada vez más holgada, su cuerpo tan frágil y deteriorado y su mirada triste. Su mismo organismo comenzaba a estar cada vez peor. Se dormía en los viajes que realizaba de la casa al colegio, su capacidad de estudio afectaba de lleno su vida, no solo académica, le costaba prestar atención como si de una niña pequeña se tratase.
Cuando su peso llegó a los 53 kilos el querer salir le era cada vez más difícil. Ingenua fue de creer que al lograr su “peso meta” podría volver a alimentarse como antes, su organismo comenzó a rechazar la comida que ella ingería, hasta el agua misma. Con suma culpa y angustia pidió ayuda a sus padres y les contó cómo había sucedido todo y el hecho de que ambos no le daban atención ni notaban el abrupto cambio. En septiembre del 2013, Milagros comenzó su tratamiento con distintos profesionales inicialmente con una psiquiatra y un psicólogo quienes la ayudarían a aceptarse tal cual es. Con varias recaídas, enojos, temores y llantos llevó adelante junto con sus padres y sus seres queridos aquel beneficioso tratamiento.
Hoy en día Milagros sigue en tratamiento realizando sus consultas diarias aunque lo primordial es el apoyo psicológico y familiar que le dan sus personas más cercanas. Poco se recuerda de lo que se consideraba icono de atractivo hace ya varios siglos, la mujer con curvas era sinónimo de belleza, el mismo Botticelli retrató a su musa en “El Nacimiento de Venus” pero los cánones de lindo o hermoso han ido mutando en el correr de los años. Los estereotipos de hombre y mujer que esta sociedad hoy en día exige no son beneficiosos para nadie. Por eso mismo es que decidí retratar el momento justo en que Milagros cuestiona su reflejo porque cualquiera por más seguro que sea de sí mismo podría estar en ese lugar, en ese sitio en el que no le agrada lo que ve o quisiera cambiarlo. Ella buscó la manera más lamentable de satisfacer lo que creía que los demás querían, pero con cariño, voluntad y esperanza ella salió adelante acompañada de sus seres queridos. Lo primordial que ayuda a cualquier persona es el apoyo y el amor.